Tal y como explicó en rueda de prensa Rafael Cordón, director de la Unidad Terapéutica de Medicina clínica de Merck, el trabajo se ha realizado a raíz de la entrada en vigor, el pasado 1 de noviembre, del decreto que obliga a los médicos a prescribir, en determinados casos, por principio activo (paracetamol), en lugar de por marca comercial de medicamento.

Este decreto supone también que cuando el usuario llega a la farmacia con la receta de un principio activo, el boticario deberá ofrecerle la medicina más barata que contenga este principio activo o molécula, sea de marca o genérica.

De esta forma, aseguró Cordón, la mayoría de los fármacos de marca que han perdido ya su patente han bajado sus precios hasta igualarlos a los genéricos para poder competir en el mercado y llegar hasta los ciudadanos. De ahí, prosiguió, que la creencia de que los medicamentos genéricos son más baratos que los de marca es "errónea".

Otro error, dice, en el que incurre el 70% de la ciudadanía, siempre en función de este estudio, es que el principio activo es igual al medicamento genérico. En realidad, explicó el representante de la farmacéutica, el primer concepto alude al nombre de la molécula que hace que el fármaco funcione y está tanto en la composición del medicamento de marca, como en la del genérico.

El fármaco genérico, aclaró, es el comercializado por una empresa que ha demostrado su equivalencia con el de marca tras un estudio de laboratorio con personas sanas.

La confusión entre medicamento genérico y principio activo se debe a que, en general, los genéricos se comercializan bajo el nombre del principio activo que incluyen y el "apellido" del laboratorio que los comercializa.

En línea con lo anterior, la encuesta pone de manifiesto que el 60% de los entrevistados están convencidos de que la nueva normativa obliga a recetar genéricos, cuando lo que hace es pedir al facultativo que prescriba (y no en todos los casos) por principio activo.

De igual forma, el trabajo señala que más de la mitad de los entrevistados desconoce que con el decreto de noviembre de 2011, el consumidor que lleve a la farmacia una receta con el nombre del principio activo de un medicamento (paracetamol, siguiendo con el mismo ejemplo), puede elegir, con el asesoramiento del boticario, qué fármaco llevarse (de marca o genérico) si tienen igual precio.

Finalmente, el estudio indica que el 70% de los jubilados prefieren seguir tomando sus fármacos de marca, en lugar de genéricos, si los primeros tienen igual precio que los segundos.