En el registro efectuado en su vivienda, los agentes intervinieron también numerosos ficheros de pornografía infantil que compartía a través de programas de intercambio de archivos. Otra de las vías para captar a sus víctimas era la mensajería instantánea, donde el detenido tenía más de 160 contactos.

Según informó este viernes la Dirección General de la Policía, varias menores habían denunciado los hechos y afirmaron que la persona que les engañó nunca les envió el dinero prometido. El detenido está acusado de delitos de grooming y tenencia y distribución de material pornográfico de menores.

La investigación comenzó en Zaragoza, donde dos menores denunciaron ser víctimas del engaño de una persona que había contactado con ellas, haciéndose pasar por una chica, a través de sus cuentas en una red social o mensajería instantánea. Los objetivos del arrestado eran siempre menores de edad, a las que engañaba bajo la promesa de darles importantes sumas de dinero por posar frente a la cámara.

El contenido sexual de los vídeos y fotografías iba creciendo a medida que aumentaba la confianza en la supuesta chica que ofrecía el dinero. El detenido daba instrucciones precisas sobre cómo debían comportarse sus víctimas en las imágenes, llegando a solicitar a las menores unas diez horas de grabación para poder percibir la cantidad acordada. Las chicas realizaban los actos pero nunca recibían el dinero. Posteriormente los investigadores detectaron denuncias similares en otras provincias.

LOCALIZACIÓN

Los agentes especializados del Grupo de Delitos Tecnológicos analizaron numerosas IP´s y consiguieron finalmente localizar el domicilio desde el cual se estaban realizando estos delitos de grooming, una vivienda de Rivas-Vaciamadrid donde el ahora detenido residía junto a una mujer.

Los agentes han constatado, tras el análisis de sus equipos informáticos, que el detenido había contactado con las víctimas a través de mensajería instantánea y han podido localizar algunas de las capturas que él mismo había realizado de las imágenes realizadas por las menores delante de la webcam. Se le imputa un delito de producción, tenencia y distribución de material pornográfico de menores.

Los policías han comprobado además que el arrestado se había descargado numerosos ficheros de pornografía infantil a través de programas de intercambio de archivos. En el registro practicado se han intervenido tres discos duros internos.

La investigación la han llevado a cabo agentes del Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Zaragoza, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía de Aragón, y la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.