Mientras el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, permanecía reunido con los portavoces del PP, Alonso defendió en rueda de prensa las cuentas que antes el Gobierno había expuesto ante los medios de comunicación.

Son "exigentes, duros", reconoció Alonso, pero también "los que España necesita para sentar las bases de la recuperación futura".

El PP considera "irrenunciable" el objetivo de bajar el déficit hasta el 5,3% del PIB al final de este año, y cree que debe ser una meta "de todos", por lo que apeló a la responsabilidad de los demás grupos parlamentarios "para que también lo sientan así".

Desde 2004 a 2011 España acumuló un endeudamiento "sin precedentes", argumenta el PP, y para recuperar la confianza es "esencial" dejar claro que ese proceso "tiene que detenerse".

En ese sentido, Alonso subrayó que estos Presupuestos son los primeros realmente solidarios, porque empiezan a "dejar de gastar el dinero de nuestros hijos y nuestros nietos", y en las prioridades de gasto prima "la idea de justicia y de reparto equitativo de las cargas".

Son, por tanto, "el primer paso" para salir de la crisis y para garantizar el crecimiento y el mantenimiento de los servicios públicos esenciales.

Aunque las cuentas saldrán adelante sin problemas con la mayoría absoluta del PP, Alonso llamó a los demás grupos a entender "que no es el año para andar mercadeando" a cambio de su apoyo.