Xuclà aseguró que el real decreto aprobado hoy para modificar el Reglamento de Seguridad Privada y el Reglamento de Armas es "un apaño" y "una mala solución", que nace "del bloqueo mental y la mala conciencia que tiene el Ejecutivo ante los problemas que tienen los barcos que faenan en el Índico y otras zonas sensibles a ataques de piratas".

En su opinión, esa medida "viene a legitimar la cesión de armas del Ejército a agentes de seguridad privada más cercanos a mercenarios que a inocentes guardias de seguridad". "No hablamos de una seguridad privada pacífica, sino de una situación en la que estos agentes del ámbito privado deberán hacer frente a ataques que, en algunos casos, deberán repeler con disparos".

Por ello, cree que lo "razonable" hubiera sido imitar el modelo de Francia, un país "perfectamente avanzado" que ha puesto a dos o tres militares a defender cada uno de los buques de bandera gala que navegan por el Índico.