En este acto participó el ministro de Educación, José Ignacio Wert, quien se limitó a calificar las protestas como “efusión sonora”.

Según los trabajadores, la protesta se dirige contra los recortes del 30% en el sueldo del personal interino y, en general, contra el plan de ajuste aprobado por el rectorado.

Los trabajadores pedían continuamente la dimisión del rector Juan A. Jimeno y la implicación del ministro en el conflicto.

Al grito de “No queremos fiesta, queremos trabajar”; “que corten por arriba”, o “Jimeno vete ya”, han mantenido la concentración en las puertas del salón donde se celebraba el acto, de forma que los discursos del rector y del ministro se han visto entrecortados por golpes y abucheos.

La mayoría de los manifestantes son personal de administración y servicios y también denuncian el despido de una veintena de compañeros.