Ante el debate que se está produciendo con la nueva Ley de Servicios de Pago aprobada en el Congreso, esta asociación denunció "el abuso que, de nuevo, se quiere hacer por parte del sector financiero a los mas débiles: los consumidores y el pequeño comercio".

Con esta nueva posibilidad legal, "se cobra dos veces a los consumidores: primero por tener una tarjeta y segundo por usarla", añadió.

En el caso de los comerciantes, este "sobreprecio" no repercutirá en sus beneficios, puesto que corresponde al pago de un coste impuesto por el sector financiero. Además, "constituye una nueva discriminación frente a las grandes cadenas que tienen sus propios medios de pago o pueden obtener tipos de comisión más interesantes".

"Bajo la apariencia de querer proteger el pequeño comercio, esta medida empeorará la situación del pequeño comercio, incapaz de operar en igualdad de condiciones en el mercado, y provoca al final una nueva distorsión del tejido comercial que perjudica a la competencia y por tanto al consumidor, hagamos lo que hagamos", concluyó.