Así lo recoge el informe mensual de diciembre de CaixaBank Research, que advierte de que la inflación también escalaría “notablemente”. En concreto, sumaría 2,1 puntos porcentuales en 2021 y 1,1 puntos en 2022, según los cálculos de la entidad financiera.

Cabe señalar que las estimaciones del estudio se basan en el mercado de futuros, que prevé que los precios se situarán en cotas “similares” a las actuales hasta el primer trimestre de 2022, y se normalizarán a partir del segundo trimestre, “aunque manteniéndose en cotas más elevadas a las de 2019”.

En este contexto, desde CaixaBank subrayaron que los precios de la electricidad podrían tener impactos sobre la inversión, ya que “las empresas pueden verse obligadas a posponer sus decisiones de inversión debido al aumento en los costes de producción”, lo que daría lugar tanto a un menor crecimiento de la inversión.

También habría un impacto negativo sobre el consumo, ya que, a pesar de que la factura de la luz suponga de media solo un 3,5% de los gastos del hogar, “el aumento del precio es de tal magnitud que el impacto acaba siendo remarcable”.

No obstante, desde la entidad insistieron en que el precio de luz se moderará “una vez las temperaturas empiecen a subir durante la primavera”.

“La demanda de gas natural se moderará y la presión sobre el precio de la electricidad también debería rebajarse. Esta moderación probablemente no nos conducirá a precios de la electricidad similares a los de 2018 o 2019”, señala el estudio, que insiste que esas cotas serán “algo más elevadas” por el aumento de la demanda por parte de China o el aumento del precio de las emisiones.