Rodríguez lanzó está propuesta en la presentación de un estudio sobre la valoración que realizan los responsables de la compra de cada hogar sobre la responsabilidad social de las empresas distribuidoras del sector de la alimentación.

El estudio pone de manifiesto, en primer lugar, el gran desconocimiento que aún existe entre los consumidores sobre qué es la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), según reconocen un 75% de los encuestados.

Además de no conocer ni haber oído hablar de la RSC, el informe revela que en muchas ocasiones los consumidores confunden este concepto con la publicidad o el márketing que realizan las propias empresas.

Por otra parte, el estudio ha querido investigar qué hacen los consumidores ante cualquier equívoco o discrepancia de precios producidos por la publicidad. El resultado ha sido que 8 de cada 10 consumidores nunca ha reclamado en sus compras de alimentación.

La realidad demuestra, además, que no saben qué es el Sistema Arbitral de Consumo y uno de cada tres incluso desconoce si el establecimiento en cuestión tiene hojas de reclamación.

La conclusión, resumió la presidenta de CECU, es que falta mucha información al consumidor y que queda un largo camino por recorrer, si bien reconoció que las empresas están dando pasos importantes para ser más responsables socialmente.

ELIMINAR LA BOLSAS DE PLÁSTICO

Entre los avances se refirió a la presencia cada vez más importante de productos de comercio justo o ecológicos. También destacó la reciente apuesta desde el sector de la distribución por la eliminación de las bolsas de plástico y su sustitución por otras más ecológicas. "Las bolsas de plástico tienen que desaparecer y creo que vamos por el buen camino", apostilló Ana Etchenique, vicepresidenta de CECU.

Con todo ello, María Rodríguez insistió en la necesidad de un "sello" que ayude a los consumidores a elegir de forma responsable y con conocimiento. En este sentido, mostró su confianza en que los trabajos desarrollados en el seno del Consejo Estatal de Responsabilidad Social de las Empresas permitan fijar criterios concretos que sirvan para identificar esos productos responsables.

El objetivo último, concluyó, es que haya un sistema de identificación de productos socialmente responsables para que los ciudadanos decidan. "La RSC ya está en la agenda del Gobierno y creo que estamos en un buen momento", remachó.