El magistrado ha dictado hoy un auto en el que desestima la petición de Manos Limpias, personada en la causa como acusación popular, y que solicitó la declaración como imputada de “la infanta Cristina Federica de Borbón y Grecia”, según informaron desde el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB).

El juez Castro ha tomado esta decisión con el apoyo de la Fiscalía. Los fiscales encargados del caso, Pedro Horrach y Juan Carrau, presentaron la semana pasada un informe ante el instructor de Palma de Mallorca en el que aseguraban que no consta “ningún indicio incriminatorio que vincule a la infanta Cristina con la actividad presuntamente ilícita desplegada por Iñaki Urdangarin y Diego Torres”, ni tampoco consta en el procedimiento que la hija del Rey “conociese dicha actividad”.

El duque de Palma, Iñaki Urdangarin, exculpó en todo momento a su mujer en su comparecencia como imputado ante el juez. Urdangarin dijo en su declaración que el papel de la infanta Cristina tanto en el Instituto Nóos, en donde formó parte de la junta directiva, como en la empresa Aizoon, donde figuraba como secretaria del consejo de Administración, fue “meramente testimonial” y no “no desempeñaba ninguna labor”.

CAREO ENTRE URDANGARIN Y TORRES

El auto dictado hoy también sirve para el juez Castro rechace someter a un careo a Urdangarin y su socio, Diego Torres, una diligencia que también había sido solicitada por Manos Limpias.

El yerno del Rey reconoció en su declaración, que se prolongó durante 22 horas entre el 25 y el 26 de febrero, que la infanta sí acudía a las juntas de Aizoon, la sociedad que compartían al 50 por ciento y a la que, según los investigadores, se desvió parte del dinero captado por el Instituto Nóos de administraciones públicas como el Gobierno Balear o la Generalitat Valenciana, pero señaló que se limitaba a “firmar las actas” que le presentaban “los asesores”.

El duque llegó a decir ante el juez Castro que desconocía si su esposa firmaba las cuentas anuales de Aizoon y añadió que nunca ha calculado el dinero que él y su mujer han podido sacar de las cuentas de la sociedad.

EL JUEZ NIEGA AMENAZAS

El propio juez Castro negó tajantemente que amenazase al duque de Palma con citar a declarar como imputada a su esposa, según informaron a Servimedia fuentes próximas al magistrado. Estas mismas fuentes señalaron que el juez “no se reconoce” en muchas de las frases que se le han atribuido, algunas de las cuales son “rotundamente falsas”, y asegura que en el interrogatorio judicial al yerno del Rey no hubo “la tensión” que se ha dicho.