Constitución
Mercedes González defiende la Constitución y añade que “no es pétrea”
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La delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, dijo este viernes que el espíritu de la Carta Magna “expresa un proyecto común como país, que nos dimos entonces y cuya vigencia hoy es tan evidente como su necesidad”, pero consideró que la Constitución “no es pétrea, ya que para que sea eficaz debe responder, como hizo en 1978, a las demandas y a las necesidades de su tiempo, a las aspiraciones y a la voluntad de la ciudadanía”.
La delegada, que intervino en el acto conmemorativo de la Carta Magna celebrado en la Puerta del Sol, sede del Gobierno regional, subrayó los valores de la transición y el último proceso constituyente español.
Dijo que con la Carta Magna se culminó el ciclo político de la transición, "una de las etapas más intensas, creativas y productivas en la historia política de nuestro país".
"Al conmemorar la Constitución, es necesario que hagamos un ejercicio colectivo de memoria que sirva para entender no solo la literalidad del texto sino, y mucho más importante, el espíritu y los valores que contribuyeron a su alumbramiento. La Constitución, es decir, el Estado social de derecho y la democracia, fue una gran obra interpretada por políticos de todos los colores: de izquierda, derecha, nacionalistas y republicanos", señaló.
Dijo que está hecha de "consensos, acuerdos, diálogo y con la conciencia cívica de que solo juntos podríamos caminar hacia un régimen pleno de derechos y libertades después de la larga noche de la dictadura y del silencio político que había impuesto en nuestra sociedad".
Dijo que no fue un tiempo fácil, sino "complejo y difícil, que exigió moderación, inteligencia política, empatía, reconocimiento del adversario, respeto a la diferencia y sobre todo ello, grandeza". "Junto a esos valores, hubo la voluntad de perseguir el sueño colectivo de una sociedad libre con todo el tesón y el empeño necesarios para no caer en las trampas e impedimentos de una exigua minoría resistente, que ha llegado hasta hoy, con el discurso de la intolerancia y el odio", añadió.
Asimismo, González destacó que la transición "no fue un camino de rosas, ni mucho menos un paseo", y añadió que “la democracia se fue conquistando mediante negociación y consenso, junto con el espíritu de una ciudadanía que reclamaba en la calle, con insistencia, pasos adelante asumiendo sacrificios, como ya había hecho durante la represión de la dictadura, tal y como quedó patente en el entierro de los abogados laboralistas de Atocha, en donde miles de ciudadanos y ciudadanas, en un ejemplo de serenidad, responsabilidad y entereza demostraron que el camino democrático era irreversible".
PAPEL "INDISCUTIBLE" DE LA CORONA
La delegada también se refirió al "indiscutible" papel de la Corona en todo este proceso y al liderazgo de "unos políticos serios y responsables, que supieron entender que frente a las dificultades no servía de nada la confrontación gratuita por ambición de poder". "Una Corona y unos políticos que fueron de la mano de la ciudadanía, ya que sin el arrojo y el valor de muchos españoles y españolas, quienes querían dar el paso definitivo a un régimen democrático, al nivel de nuestros vecinos europeos, nada hubiera sido posible", señaló.
También habló González de los Pactos de la Moncloa, "que evitaron el hundimiento de nuestra economía por la crisis, irresponsablemente disimulada, por los gobiernos de la dictadura". "Lo importante no era hacer prevalecer la razón propia ni atacar al adversario, sino resolver los graves problemas que aquejaban a nuestro país. Son lecciones de la historia que no podemos obviar", señaló.
Mercedes González recordó los grandes cambios sociales, políticos, económicos y culturales vividos en España gracias a la Carta Magna, y puso de ejemplo que entonces solo había 18 diputadas y cinco senadoras en esas Cortes Generales.
Sobre las mujeres, señaló, “siendo la mitad de la sociedad, no contaron con la representación que hoy sí tenemos. Recuerden que veníamos de un modelo social que negaba a la mujer derechos fundamentales como el de poder abrir una cuenta bancaria, disponer de su propio dinero o poder realizar su vida personal sin la tutela de un hombre, padre primero, marido después. Si el inmovilismo cerril hubiera triunfado entonces, hoy no habría aquí dos mujeres presidiendo este acto conmemorativo".
"Era una España en blanco y negro. Pero nuestro mundo ya no es ese. Hemos avanzado sin detenernos, hemos progresado en muchos ámbitos. Por ello, tenemos nuevos problemas y por tanto, afrontamos nuevas realidades. Hoy legislamos para que los españoles puedan tener, además de una vida digna con todos los derechos y libertades, un final sin sufrimiento. Y hoy el derecho a la vivienda se legisla para asegurar que un mercado voraz no desposea a los españoles de su derecho a un hogar", concluyó.
(SERVIMEDIA)
03 Dic 2021
SMO/clc