Según informó Funcas, en su anterior previsión, el objetivo era que el PIB español caería un 0,5% este ejercicio.

Las nuevas previsiones incorporan las medidas ya adoptadas por el Gobierno en diciembre –reducción de gastos en el presupuesto del Estado y aumento del IRPF y otros impuestos por valor de 15.000 millones de euros- y medidas adicionales a adoptar por el conjunto de las administraciones públicas por otros 26.000 millones.

Todo ello da como resultado subidas de ingresos y reducciones de gasto por valor de 41.000 millones, un 3,8% del PIB. Esta sería incialmente la cifra necesaria para reducir el déficit público del 8,2% en 2011 (cifra estimada a la espera de conocer los datos oficiales) hasta el objetivo del 4,4%.

"Este shock fiscal produce efectos tanto negativos como positivos sobre el potencial de crecimiento de la economía, pero a corto plazo predominan claramente los primeros", afirma Funcas.

No obstante, el PIB podría recobrar tasas trimestrales positivas, aunque moderadas, a partir del primer trimestre de 2013, que permitirían un "modesto" crecimiento medio anual del 0,2% en dicho año.

No obstante, Funcas estima que el empeoramiento en las previsiones no sólo es consecuencia del mayor ajuste fiscal requerido en 2012 como consecuencia de la desviación del déficit público en unos dos puntos porcentuales del PIB en 2011.

Las mayores ratios de capital exigidas por la Autoridad Bancaria Europea y las "severas" exigencias en materia de provisiones de pérdidas introducidas en la reciente reforma del sistema financiero, "si bien totalmente positivas a medio plazo y necesarias para recobrar la confianza de los mercados, van a traducirse en el corto plazo en un endurecimiento adicional de las condiciones financieras para las familias y empresas".

Asimismo, Funcas explica que el debilitamiento de la coyuntura europea actúa de freno sobre las exportaciones, "el único motor de la tímida recuperación de la economía española durante 2010 y primera mitad de 2011".

Por otra parte, la caída del empleo en el último trimestre de 2011 "fue más intensa de lo esperado, lo que ejercerá un mayor efecto contractivo sobre el consumo y sobre las expectativas de lo inicialmente estimado".

Con ello, el hundimiento de todos los componentes de la demanda nacional en el cuarto trimestre sitúa a esta variable "en un punto de partida muy bajo que condiciona negativamente su media para el conjunto de 2012".

Con respecto al saldo presupuestario de las AAPP, Funcas considera que el déficit se situará en el 5,8% del PIB en 2012, significativamente alejado

del objetivo inicial del 4,4%.

La reducción del déficit al 4,4% requeriría medidas fiscales y/o presupuestarias adicionales a las contempladas, lo cual, a su vez,

se traduciría en una caída más intensa del PIB.

TASA DE PARO

En cuanto a las previsiones de empleo, los registros de Funcas apuntan que han evolucionado peor de los esperado, aunque la reforma laboral "debería intensificar poco a poco la utilización del factor trabajo por unidad producida".

Así, se espera una caída este año del 3,4% de los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo (-580.000 en media anual) y del 0,8%

(-130.000) el próximo.

Con todo ello, la tasa de paro media anual seguirá aumentando hasta el 24,2% en 2012 y el 24,5% en 2013.

Además, hasta la segunda mitad de 2013 no cabe esperar una estabilización del empleo.