El estudio ha sido elaborado en el marco de la campaña PanCada Día, una iniciativa promovida por el sector del pan español y cuyo objetivo es difundir las propiedades nutricionales y los beneficios para la salud que ofrece este alimento.

El informe señala también que el 85% de las madrileñas consume entre una rebanada de pan y media barra al día, lo que en realidad equivale a menos de 125 gramos, una cantidad insuficiente si se tiene en cuenta que los especialistas recomiendan un consumo diario de entre 200 y 250 gramos.

Nueve de cada diez madrileños comen pan de forma habitual, aunque más del 50% cree que engorda, por lo que se consume una cantidad menor de la recomendada. Este bajo consumo está especialmente arraigado en las mujeres que, en su mayoría, sólo lo toman una o dos veces al día.

Aun así, el pan es el alimento principal de los desayunos de la mitad de los encuestados y para muchos es imprescindible a la hora de acompañar platos como los huevos fritos. Por su parte, los mayores de 55 años son los que mejor lo valoran como alimento básico de una dieta equilibrada.

La mayoría de los madrileños (63%) da por hecho que el pan engorda, una afirmación que hacen por igual hombres y mujeres de todas las edades (aunque en los mayores de 61 años esta creencia pierde fuerza). En la misma línea, el 52% de los entrevistados dice que lo que más engorda del pan es la miga.

Pero, a pesar de la creencia de que engorda, el 90% de los madrileños consume pan de forma habitual porque, entre otras razones, les gusta (68%), les resulta extraño comer sin pan (34%) y lo consideran saludable (11%).

Casi el 50% de los madrileños asegura tomar pan durante el desayuno, con un porcentaje mayor de mujeres (58%) que de hombres (43%). Su preferido es el fresco tostado (46%), y en cuanto al acompañamiento ideal, en primer lugar está la mantequilla y mermelada (34%), después el aceite y la sal (21%), y en menor medida el aceite, tomate y jamón (9%).

Algunos de los platos para los que en Madrid el pan se considera imprescindible son los huevos fritos con chorizo (21%), los platos con salsas (14%) y las lentejas y la fabada (9,5%).

Por otra parte, una de las sentencias con la que se identifican en mayor medida es que si no toman pan durante las comidas es como si no hubieran comido, frase respaldada por el 27% de los madrileños.

Mientras, el 22% afirma que echa de menos los bocadillos que le ponían de pequeño, al 21% lo que más le gusta del pan es el "currusco o pico", el 15% tiene la costumbre de empezar el pan según lo lleva a casa y, finalmente, un 11% comienza la ración de pan antes incluso de empezar a comer.

Según el estudio, la cualidad del pan que más valora la mitad de los encuestados es que esté crujiente, aunque al 24% de los hombres les gusta "todo" y el 30% de las mujeres prefieren tanto la corteza como el sabor.

Aunque en el mercado existe gran variedad de pan, la barra tradicional es la que más se consume en Madrid (el 51% de los encuestados así lo manifiesta), seguida de la baguette, (23%) y los panes integrales y la chapata (5%). Los datos demuestran que en los hogares madrileños el pan se compra diariamente (71% de los casos).