Lo hizo en su comparecencia a petición propia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados para desgranar sus proyectos al frente del Ministerio, a pesar de que el Gobierno británico a través de diferentes portavoces, y el propio primer ministro David Cameron en su encuentro de hoy con el presidente español, Mariano Rajoy, han advertido de que este tema quedará siempre a expensas de la voluntad de los gibraltareños.

Pese a esa negativa a reabrir las conversaciones, García-Margallo volvió a poner sobre la mesa la necesidad de hacerlo, "como se acordó en Bruselas", en referencia al llamado Proceso de Bruselas, que hoy mismo el ministro principl de Gibraltar, Fabian Picardo, dio por "muerto y enterrado".

El titular de Exteriores también reiteró su planteamiento de las conversaciones a dos niveles: Uno, sobre soberanía, entre España y el Reino Unido, y otro sobre el bienestar de los habitantes de la zona incluyendo como interlocutores a Gibraltar y al Campo de Gibraltar español. "Dos banderas y cuatro voces", sintetizó.