El portavoz del SUP, José María Benito, y el de la CEP, Lorenzo Nebreda, valoraban así, en declaraciones a Servimedia, que el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, asegurara el miércoles en el Congreso que la banda etarra ha dejado de ser un problema policial y tiene ahora una “dimensión política”. El ministro aclaró, posteriormente, que lo que quería decir es que la organización criminal quiere convertir su derrota operativa en una victoria política.

A este respecto, Benito, del SUP, señaló que “ETA sigue siendo un problema policial y judicial”, puesto que la banda terrorista sigue con su “actividad normal” en Francia, a pesar de que en octubre pasado anunció el cese de los atentados.

Este portavoz añadió que las palabras del ministro fueron “un error”, puesto que la banda etarra “sigue siendo un problema policial, porque sigue presente”.

Según este representante policial, “el ministro sabe que la banda terrorista sigue con su actividad de forma normal, no ha cesado de moverse en Francia. Los etarras siguen robando coches, material y organizándose”.

MEDIDA PREVENTIVA

El portavoz del SUP añadió que esto es algo que conoce Fernández Díaz, por lo que lo que cabe decir es que “ETA sigue siendo el mismo problema que era, la única diferencia es que, de momento no mata y esperemos que sea definitivamente”. Añadió que sigue habiendo terroristas por detener y asesinatos por aclarar, por lo que “mientras eso siga así, ETA sigue siendo un problema policial y judicial; lo político es otra cosa”.

Por su parte, Nebreda, de la CEP, manifestó que existen “argumentos más que suficientes” para ilegalizar Bildu y Amaiur, debido a que hay evidencias de que estos partidos forman parte del “aparato político de ETA”.

Nebreda se refirió a que en su sindicato quieren creer “que no se han interpretado correctamente las palabras del ministro”. Según este portavoz, el ministro debe querer decir que la banda etarra ha perdido casi toda su capacidad operativa, pero ahora tiene “gran dimensión” su “aparato político”, en referencia a Bildu y Amaiur.

A este respecto, el portavoz de la CEP estimó que “hay argumentos más que suficientes” para ilegalizar estos partidos abertzales. A su juicio, tomar esta decisión ahora puede hacer que la dimensión política de ETA no adquiera “un carácter alarmante”.