"Lamentamos mucho lo ocurrido", precisó a Servimedia un portavoz de la compañía, quien agregó que "la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, que es la máxima autoridad en esta materia, admitió las pruebas que presentamos en relación con la denuncia y además las dio por buenas, con lo cual no hay ni sanción ni se nos ha expedientado".

"La compañía se limitó a hacer lo que le pide el plan de seguridad y es no permitir el paso a una persona que puede poner en peligro la seguridad de todo el pasaje", concluyó el portavoz de la compañía.

Por el contrario, la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (Famma-Cocemfe Madrid) denunció trato discriminatorio de la compañía hacia esta mujer discapacitada, que va en silla de ruedas, a la que acusó de presentar "síntomas de embriaguez", mientras que Famma sostiene que "esta mujer padece esclerosis múltiple y retraso psicomotor" y además presenta un certificado médico que así lo afirma.

Además, esta federación denuncia que Vueling no le hizo un test de alcoholemia que certificara la versión dada por la compañía.