El presidente de esta asociación, el coronel retirado Leopoldo Muñoz, dio testimonio a Servimedia de su experiencia en la agencia Namsa, con la que la OTAN contrataba el mantenimiento de aviones como el siniestrado, y apeló a ese conocimiento para concluir que las autoridades militares del momento no tuvieron ninguna responsabilidad en el accidente.

El juez Grande-Marlaska archivó hoy la causa culpando del siniestro, ocurrido el 26 de mayo de 2003, no a la agencia Namsa, sino a la falta de pericia de los pilotos y la tripulación del Yak-42 contratados por la OTAN.

En otro orden de cosas, el presidente de la AME avaló también el nombramiento de un militar, el general Juan Antonio Díaz Cruz, como nuevo director de Protección Civil y Emergencias. El coronel Muñoz entiende que es "lógico" en tanto en cuanto que el elemento más importante en la lucha contra las catástrofes naturales es ahora la Unidad Militar de Emergencias (UME).