Así lo dijo la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, cuando se le preguntó por la manifestación convocada por policías y guardias civiles para el próximo 27 de noviembre en Madrid al entender que la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana es perjudicial para ellos y para el conjunto de la sociedad.

Rodríguez mostró “confianza” en el trámite parlamentario de esta reforma a la que, recordó, estaban “comprometidas” las dos fuerzas políticas (PSOE y Unidas Podemos) que forman parte de la coalición de Gobierno.

Rodríguez defendió que con esta reforma se busca corregir el hecho de que, durante su paso por el Ejecutivo, el PP “no solo se dedicó a recortar pensiones sino también derechos y libertades”, y demostrar que el actual es un “Gobierno que cumple con la ciudadanía”.

“El Gobierno tiene un compromiso con la ciudadanía", reiteró, ya que esa ley “vulneraba derechos importantes” y libertades “que en nuestro país costaron mucho conquistar”, y por parte del Ejecutivo "ese compromiso sigue vigente”, explicó.

“En cualquier caso, y con la misma rotundidad, no quería dejar la oportunidad para decirles que el Gobierno aprecia y quiere a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, al Cuerpo Nacional de Policía y a la Guardia Civil, y no vamos a tener palabras de agradecimiento al apoyo que prestaron a España en los momentos más duros de la gestión más trágica que hemos tenido que vivir con la pandemia”, afirmó la ministra.

“Nuestro máximo aprecio y puesta en valor”, dijo la portavoz, y, tirando de refranero, afirmó que “el camino se demuestra andando” y “obras son amores y no buenas razones”, por lo que “frente a los recortes en efectivos de Guardia Civil y Policía Nacional, este Gobierno revirtió estos cambios aportando nuevas plazas como nunca antes se había producido”.