En su calidad de ser uno de los accionistas de la compañía, afirma en un comunicado que ha impulsado “de manera activa y sistemática”, en el último año, la búsqueda de un socio industrial que permitiera garantizar su viabilidad y consolidar la conectividad del Aeropuerto de Barcelona.

Este proceso, aclara en su comunicado, “se ha dado por concluido después de que las intensas negociaciones con Qatar Airways no han culminado en un acuerdo”.

“En un contexto de crisis económica como el actual”, agrega, “el Gobierno tiene que ser extraordinariamente cuidadoso con sus prioridades de gasto”.

Añade que la administración catalana ha participado del proyecto teniendo en cuenta las limitaciones de la legislación europea en lo referente a la libre competencia. En conclusión, estos dos factores “imposibilitan nuevas aportaciones de capital” de la Generalitat.

Con todo, la Generalitat reafirma su voluntad de seguir trabajando para mejorar la conectividad del Aeropuerto de Barcelona.