En declaraciones a Servimedia, Pérez del Campo señaló que con el "off the record” sobre la situación civil de la vicepresidenta (no está casada por la Iglesia) “Blázquez pretendía adoctrinar a los periodistas”.

Además, criticó con dureza las manifestaciones del arzobispo de Tarragona, quien había afirmado que las mujeres deben cuidar de sus maridos como si fuesen el más pequeño de sus hijos.

“La Iglesia ha demostrado que es machista”, subrayó Pérez del Campo, pues con estas afirmaciones se viene a decir a las feligresas que “están para servir a su marido”, agregó.

Pérez del Campo recordó la cita bíblica “he aquí la esclava del Señor”, y añadió que lo que la Iglesia pretende es que las mujeres “complazcan en todo”.

A su juicio, “España tiene una constitución que en teoría se dice aconfesional, pero la práctica del día a día demuestra la confesionalidad del estado”.

Por ello pidió “una reforma a fondo” de la Carta Magna, para delimitar con toda claridad ambas esferas, y exigió a la Iglesia que “contribuya con la crisis y deje de percibir los más de 13 millones de euros que cada mes recibe de todos los españoles”.