Según informó el Instituto Armado, los hechos se produjeron cuando los radares de vigilancia detectaron una embarcación que se acercaba a la costa gaditana. Los agentes siguieron a los sospechosos hasta el muelle de Barbate.

Se descubrió entonces que se trataba de una entrega de 1.800 kilogramos de hachís, que estaban siendo bajados de la embarcación y cargados en un camión frigorífico. En esta actuación estaban implicadas nueve personas, que posteriormente fueron detenidas.

Sin embargo, en el momento del arresto, uno de los narcotraficantes emprendió la huida a bordo de la embarcación que había trasportado la sustancia estupefaciente. El sospechoso fue seguido por la Guardia Civil en helicóptero, mientras que realizaba maniobras evasivas para intentar evitar su detención.

Los agentes observaron como en un momento dado el narcotraficante se arrojaba al agua y cómo la embarcación, sin control, le pasaba por encima. La Guardia Civil procedió entonces al rescate de este individuo, que presentaba graves heridas en ambas piernas.

Los miembros de la Benemérita, ante la dificultad de trasladar al herido en ambulancia, lo llevaron en helicóptero al Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz. Una vez allí, los facultativos informaron de que el herido se encontraba grave, si bien la rapidez de la actuación de los agentes hacía que no se temiera por su vida.