El dispositivo, denominado Arm Assist, ayuda a paliar el deterioro neuromuscular de estos pacientes desde casa y a mejorar el seguimiento y la evaluación de su evolución hecha por el personal clínico.

El objetivo del sistema es, concretamente, que el paciente pueda mejorar la movilidad de su brazo mediante un dispositivo robótico móvil y una plataforma software con videojuegos para la telerrehabilitación que permite realizar una actividad física "progresiva, repetitiva y motivadora, orientada a la práctica de tareas funcionales virtuales", explicaron en su presentación los padres del brazo asistencial.

El equipo se compone de un dispositivo de base móvil que registra los movimientos del brazo y que está unido al usuario mediante una ortesis.

La base móvil va conectada a un ordenador estándar, de manera que permite al enfermo interactuar con distintos juegos, desarrollados específicamente para la terapia, a través del movimiento del brazo.

El dispositivo Arm Assist se encuentra actualmente en Valencia donde el Instituto de Biomecánica (IBV) y el Hospital Universitari i Politècnic La Fe están realizando un estudio clínico para evaluar su funcionalidad, usabilidad y ventajas clínicas en pacientes que han padecido un ictus. Posteriormente, Arm Assist se probará en el Instituto Guttmann de Barcelona.

En la actualidad, unos 15 millones de personas sufren un ictus cada año en todo el mundo y de ellos, la tercera parte se quedan con discapacidades crónicas.