Según el dirigente de UGT, "quien ha puesto plazos ha sido el Gobierno, nunca nosotros", en referencia a las declaraciones de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, quien ha dado de plazo el fin de semana para un acuerdo.

"Para nosotros este es un tiempo de negociación" y el sindicato no está de acuerdo con la idea del Gobierno de que las negociaciones entre patronal y sindicatos son claramente insuficientes.

"Esto es algo que nos sorprende porque debería ser el Gobierno el que dijera exactamente, y que no ha dicho hasta ahora a los interlocutores, qué es lo que quiere en la reforma laboral", afirmó Ferrer.

En esta línea, Ferrer recordó que "parece que la vicepresidenta olvida que la CEOE, con su máximo responsable el señor Rosell, ha dicho que ya no es tiempo de negociación y que están esperando que el Gobierno imponga una reforma laboral".

Frente a la "responsabilidad" de los sindicatos, el sindicalista dijo que la CEOE "lo único que ha planteado han sido aspectos claramente maximalistas, destinados a detruir empleo a través de abaratar el despido".