Castilla y León. CCOO exige a los presidentes de Caja España, Caja Duero y Caja de Burgos una propuesta “única” de fusión
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El secretario general de CCOO en Castilla y León, Ángel Hernández, exigió hoy a los presidentes de Caja España, Caja Duero y Caja de Burgos, que presenten ante los consejos de administración de sus entidades en el plazo comprometido con el Banco de España, es decir, antes del 10 de noviembre, una propuesta “única” de fusión, que incluya la figura jurídica de la nueva caja, su organigrama de dirección y representación social, sedes, plan de negocio y protocolo laboral.
Hernández incidió en que los tres presidentes deben asumir su responsabilidad y advirtió de que podría haber un intento de no llevar una propuesta única cerrada a los consejos, sobre el organigrama y las sedes, cuestiones, recordó, que “han impedido muchas cosas” en la región.
En este sentido, reiteró que su sindicato “no va a jugar en los consejos de administración” sino que mantendrá en todo momento una postura de responsabilidad en defensa de los intereses de los ciudadanos y los trabajadores. Además, aclaró que la central no frenará el inicio del proceso en los consejos, que deberán aprobar una propuesta, dijo, que tendrá que incluir el compromiso de negociación del plan laboral con los sindicatos. Un protocolo que deberá estar cerrado antes del 31 de diciembre de este año, fecha en la que todo deberá estar definido ante el Banco de España, para optar al fondo de reestructuración bancaria.
Hernández aclaró que tras este proceso si se establece una “reconversión innecesaria”, unas “malas” condiciones para los trabajadores, y un mal servicio para el ciudadano, “CCOO votará en contra de la fusión en las asambleas generales que se celebrarán en febrero”.
El secretario general de CCOO en la Comunidad remarcó una y otra vez la necesidad de que al menos se ponga en marcha el proceso en los consejos y pidió “humildemente” a los máximos responsables de las cajas que los convoquen en el plazo previsto. Al respecto, advirtió de que “los trabajadores de las cajas no pueden permitirse un paso atrás en el proceso, porque la situación económica lo exige”.
Finalmente, Hernández analizó las informaciones que apuntan al cierre de 300 oficinas y la eliminación de entre 1.400 y 1.800 empleos, de la propuesta de fusión, unas cifras que consideró “inadmisibles” para preservar el servicio que prestan las entidades en una comunidad tan extensa como Castilla y León.
(SERVIMEDIA)
22 Oct 2009
CDM/isp