En una nota de prensa, Famma insiste en que se trata de ayudar y no de responsabilizar indirectamente a los colectivos más vulnerables de la actual coyuntura a través de una "camuflada" política de recortes económicos que no van a hacer otra cosa que multiplicar la pobreza y empeorar la dramática situación de miles de familias, azotadas ya por un acuciante desempleo.

La organización considera que "a nadie se le escapa que todavía hay mucho que recortar antes que atacar a los servicios públicos y a las capas de la sociedad que por su situación de discapacidad cuentan en muchas ocasiones con mayores necesidades que el resto de la sociedad".

Según Famma, "si no se apuesta por invertir en bienestar social, las personas con discapacidad vivirán un retroceso importante en su integración social y su recuperación será más costosa a medio plazo si no se mantiene lo existente". "A nadie se le debe olvidar que padecer una discapacidad genera un mayor coste económico personal", añade.