Tras señalar que “el precio de la luz, el gas y otros productos esenciales se está disparando cada vez más”, destacó que “hace unos días vimos cómo se ha cerrado el gasoducto por el que transitaba el 25% del gas que necesita España y el temor al desabastecimiento es real entre la gente”.

Por eso, añadió, “gobernar desde el dogmatismo y los posicionamientos arbitrarios, radicales o intervencionistas tiene un alto coste que pagan las empresas y las familias”.

Dijo que su Gobierno confía en “un modelo que nos haga menos dependientes desde el punto de vista energético, que apueste por las energías renovables y todo en beneficio del ciudadano y de las empresas”.

Consideró que el de la Comunidad de Madrid es un modelo que “estimula, incentiva, facilita, de impuestos bajos, que elimina barreras que dificultan el crecimiento y la innovación. Un modelo que, desde la colaboración público-privada, garantice la seguridad y la confianza de empresas e inversores para seguir trabajando en tecnologías de esta materia”.