La trigésimo primera Concentración Motorista Invernal volverá así con su festiva acampada, desafiando a las bajas temperaturas y este año también combatiendo las inclemencias económicas derivadas de la crisis.

Y es que, el Club Turismoto, organizador del evento, asegura que ha visto recortadas las ayudas institucionales y que ha sufrido la marcha de algunos patrocinadores a causa de la crisis económica mundial, "lo que supone un problema", a pesar de la habitual masiva afluencia al evento.

En 2012, los amantes de la moto desafiarán al frío y se darán cita en la provincia vallisoletana para celebrar, entre otros actos, su mítico desfile con antorchas en honor al Motero Caído.

Otros atractivos del festival son la parrillada o el caldo caliente, que a lo largo de los años siguen convenciendo a asistentes de toda España y de más allá de sus fronteras.