El promedio de las mujeres (23.706 euros) fue inferior al de los hombres (27.411), en tanto que, por edades, la menor renta correspondió a los hogares cuya persona de referencia tenía al menos 65 años (18.198) y la mayor, cuando el perceptor principal tenía entre 45 a 64 años (30.543).

Según el nivel educativo, el ingreso medio de los hogares cuando la persona de referencia contaba con estudios superiores era de 35.930 euros y descendió a 19.210 euros cuando había cursado educación primaria o inferior.

POBREZA

Por otro lado, un 19,6% de la población residente en España estaba por debajo del umbral de pobreza relativa, sin considerar la posesión de vivienda, aunque esta tasa cae al 15,5% si se imputa el valor del alquiler de la casa.

Por edades, la tasa de pobreza sin el valor del alquiler imputado se situaba en un 16,7% en las personas de entre 16 y 64 años y alcanzaba el 27,6% para los mayores de 65 años.

Extremadura (38,4%) fue la comunidad autónoma con la mayor tasa de riesgo de pobreza en España sin incluir el valor del alquiler imputado, seguida de Andalucía (28,9%), al contrario que Navarra (6,5%) y País Vasco (8,5%).

Por otra parte, un 28,1% de los hogares españoles consideraba en 2008 que no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos, porcentaje que se elevaba hasta el 51,3% en las familias con ingresos anuales inferiores a 9.000 euros.

Además, un 33,5% de los hogares no podía permitirse ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año (56,4% en las familias con menos de 9.000 euros).

El 50,3% de los hogares disponía de vivienda en propiedad sin hipoteca el año pasado, un 31,9% tenía casa en propiedad y con hipoteca pendiente (con una cuota media mensual de 605 euros) y un 8,4% pagaba un alquiler a precio de mercado.

En 2008, cada familia destinó mensualmente 296 euros de media a gastos relacionados con la vivienda principal (alquiler o intereses hipotecarios, comunidad, agua y otros gastos).

Por último, respecto de los problemas del barrio, un 21,8% de las familias sufrió ruidos de vecinos o procedentes de la calle, un 15,4% se vio afectado por la delincuencia y el vandalismo y un 13,2% padeció contaminación y otros problemas medioambientales.