El juez de la Audiencia Nacional, propuesto por el PSOE como candidato al TC dentro de su pacto con el PP, declaró su satisfacción por recibir la propuesta para cubrir una plaza en el Constitucional, ya que se trata de “un destino único para un jurista práctico” por la “relevante misión que desempeña” y por la “estimulante labor intelectual” que implica.

Expuso ante los grupos políticos presentes en esta Comisión, que abandonaron Vox y Ciudadanos tras una primera intervención, su currículum en la jurisdicción desde hace 36 años. Sobre la posibilidad de que por su experiencia tuviera que abstenerse de participar en algún asunto, respondió que no ve ahí “ningún problema”.

Defendió, asimismo, que la legitimidad de origen del juez constitucional está en el nombramiento precisamente por los órganos constitucionales que tienen esa competencia. En cuanto a si el debate político puede ser trasladado y resuelto o zanjado con criterios y pautas que “solo obedezcan a la Constitución y al mundo del derecho”, consideró que “sí”.

Al hablar de los reproches hacia los magistrados por su carga ideológica, enfatizó que el juez “no tiene prohibido” tener una idea, pero sí ha de tener el “hábito intelectual y moral” del “compromiso a través de la independencia con el derecho”.

Contó aquí una anécdota personal y se remontó al año 2018, cuando en la Sala Penal en la que trabaja se planteó una pieza en la que estaba presente un partido que había propuesto su candidatura 22 años antes como vocal del Consejo General del Poder Judicial.

En este sentido, dijo ser consciente de que la imparcialidad del juez también tiene que ver con el “juego de las apariencias” y por eso él planteó a la sala que había ese “problema” al que podrían aludir los medios o alguna parte interesada en el proceso. “El pleno por unanimidad consideró que no había ningún problema en cuanto a mi imparcialidad y yo en eso me muevo con una cierta comodidad”, trasladó.

Por su parte, el diputado del PSOE Francisco Aranda resaltó que Sáez representa una “sensibilidad” que va “más allá des la solvencia” y la capacidad jurídica, así como que, en su trayectoria, ha demostrado construir una visión “avanzada y garantista” de los derechos y libertades. Antes de acabar, reiteró el compromiso de su partido con el acuerdo alcanzado con el PP.

Asimismo, la diputada del Partido Popular Isabel María Borrego aseguró que los candidatos que finalmente sean elegidos para formar parte del TC ejercerán su función con “independencia”, al tiempo que comentó que el acuerdo alcanzado entre PP y PSOE es para elegir profesionales “cualificados” y que puedan realizar su función con “independencia”, “como el señor Sáez”.

A su vez, el diputado de Unidas Podemos Txema Guijarro comentó que la pertinencia técnica de este magistrado ha sido “subrayada incluso por los medios de comunicación de la derecha”, lo cual “no es común”. Además, le deseó suerte y esperó que para los años que vienen tenga la “luz” para “alumbrar” muchos de los temas que van a pasar por el TC.

Además, el diputado de Junts Josep Pagès y Massó dijo que Sáez presenta una idoneidad “total y absoluta” para el cargo para el que se le propone y apuntó que le ha ganado al usar el término “juez constitucional” durante su primera intervención. También preguntó a Sáez si cree que va a tener que abstenerse en los casos relacionados con el ‘procés’ independentista.