Los acusados de ser miembros del “subaparato de captación” son Maider Viso, Rubén Nieto, Igor Astibia, Ibón Urrestarazu y Alaitz Iturrioz. El fiscal encargado del caso, Carlos Bautista, pide para ellos penas de diez años de prisión al atribuirles delitos de pertenencia a organización terrorista.

Los presuntos colaboradores que se sentarán en el banquillo de los acusados son Francisco Agustín Cabo, Iván Medina, Koldo Lecuaona, Gustavo Fernando Fernández Villate, Jon Duque Santacoloma y María Margarita Eizaguirre, quienes se enfrentan a una petición de siete años de prisión por delitos de colaboración con organización terroristas.

El nombre de los acusados apareció en los documentos incautados al dirigente de ETA Juan Fernández Iradi, alias “Susper”, detenido en diciembre de 2002 en Tarbes (Francia).

El escrito de acusación del fiscal Bautista asegura que entre estos papeles aparecieron “abundantes documentos que revelaron las estructuras y componentes del denominado ‘subaparato de captación’”.

Los documentos incautados revelaron “un variado sistema de comunicación y citas orgánicas en diferentes ciudades de Francia”. En estas citas, los enlaces recibían instrucciones para comunicarse con “potenciales miembros de la organización” y, a su vez, facilitaban “datos de personas como posibles objetivos de acciones criminales”.