El estudio, que fue presentado este jueves en rueda de prensa, revela que sólo el 3% de las 310 personas encuestadas acertó como mínimo nueve de las diez respuestas del test en que se ha basado el informe. El 17% logró contestar correctamente siete u ocho preguntas y el 30% cinco o seis. Sin embargo, el 50% no consiguió pasar de cuatro aciertos.

El estudio refleja igualmente que el 34,78% de los inmigrantes iberoamericanos poseía un permiso de conducir vigente en España, de los cuales el 34,47% disponía del carné tras afrontar algún tipo de examen mientras que el 49,06% no se había sometido a ninguna prueba. Así, casi el 20% de los conductores inmigrantes manejan el volante en España con un permiso canjeado.

Un 47,82% afirma que siente la necesidad de recibir información complementaria en materia de seguridad vial, mientras que un 24,22% desconoce cómo actuar adecuadamente en caso de accidente de tráfico. Además, el 41,92% no se siente seguro a la hora de circular por las carreteras españolas.

El estudio concluye que la mayoría de los inmigrantes iberoamericanos en España tienen una baja formación en materia de normativa española sobre circulación de vehículos a motor y sobre seguridad vial.

Tanto José Miguel Báez, presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas, como Jean Picard, delegada de Stop Accidentes para Iberoamérica y fundadora de esta asociación, coincidieron en señalar que del informe se desprende que la población inmigrante latinoamericana necesitaría más y mejor formación vial antes de convalidar su permiso de conducir.