El presidente de la Armh, Emilio Silva, aseguró a Servimedia que la decisión de la Comisión del Valle de los Caídos “es lo que debe ser” aunque criticó al gobierno en funciones por “no haberlo hecho cuando tenían el poder” y dejando así la decisión al líder del Partido Popular y vencedor de las elecciones generales, Mariano Rajoy.

De esta forma, pese a que “un problema simbólicamente tan importante y tan grave esté siendo utilizado para una bronca política y no para dar soluciones a las víctimas”, Silva manifestó su deseo de que la decisión se lleve acabo en la nueva legislatura presidida por Rajoy. “Ojalá lo hiciera”, añadió.

Silva puntualizó la recomendación de la Comisión de Expertos de alcanzar con la Iglesia la autorización pertinente, asegurando que “el propietario de ese monumento, por mucho que haya un acuerdo con la Iglesia, es el patrimonio del Estado que tiene que decidir que ocurre dentro de sus competencias”.

Asimismo, dijo no saber “hasta qué punto es necesario” el consenso parlamentario, ya que “es una cuestión de las competencias del poder Ejecutivo”.

El presidente de la Armh criticó la falta de consenso para que “un dictador salga de un monumento que está sufragado por los impuestos de todos los ciudadanos, en especial por todas las víctimas”, por lo que afirmó que “es bastante triste que un poder ejecutivo democrático no pueda tomar por su cuenta esa decisión”.

A su juicio, “es un insulto y un maltrato a las víctimas la existencia del Valle de los Caídos” por lo que “no debería haber duda de que cuando se está maltratando a una familia, el Estado sea el que defienda a la víctimas” y “tomar esas medidas”.

En referencia a la recomendación de la comisión de que los restos del fundador de la Falange, José Antonio Primo de Rivera, permanezcan en el mausoleo, señaló que “no es una víctima cualquiera, representa mucho más” por lo que desde la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica defendieron su traslado.