La marcha partió hacia las cuatro y media de la tarde desde el denominado "Campamento de la Solidaridad", ubicado en el paseo de la Castellana, y en donde están instaladas un total de 280 tindas de campaña.

En el acto, que transcurrió sin incidentes, participaron representantes sindicales y miembros de colectivos ecologistas y de distintas organizaciones no gubernamentales. Asimismo, numerosos conductores madrileños expresaron su solidaridad con los manifestantes haciendo sonar el claxon de sus vehículos.

Los concentrados portaban pancartas con los siguientes lemas: "O,7 es una miseria. Seamos miserables", "0,7 por un mundo mejor" y "0,7, ya, asegurando claridad y transparencia en e empleo". La cadena humana concluyó frente al palacio de la Carrera de San Jerónimo, donde los organizadores leyeron un comunicado.

El acto de protesta, según informó a Servimedia un portavoz de la organización, pretendió transmitir a los diputados que ahora está en sus manos introducir las enmiendas necesarias a la Ley de Presupuestos, para que España realice una aportación significativa al desarrollo de los países del Sur.

Los responsables de la mencionada plataforma consideran que el Parlament puede hacer viable que la partida de 7.500 millones de pesetas destinados para ayuda al desarrollo se incrementen hasta 135.000 millones, con lo que se alcanzaría el 0,5 por ciento de ayuda a los países más pobres.