Más de 3.000 hectáreas destrozó el fuego en la Comunidad Valenciana durante este fin de semana, sobre todo en los términos municipales de Buñol y Andilla, en la provincia de Valencia; en los de Benissa, Beniarda y Llibert, en Alicante, y en las proximidades a Bejis y Sacañet, de Castellón.

Sobre la responsabilidad de los siniestros registrados a escala nacional durante el fin de semana, una portavoz de Icona manifestó a Servimedia que "la mayoría tienen su origen en la egligencia de la gente, aunque alguno pueda ser intencionado", según estiman los técnicos del instituto.

Por ello, el Icona insiste en aconsejar que no se realicen, bajo ningún concepto, fuegos en el campo, ya que las condiciones climáticas son de máxima alarma, y recomienda, asimismo, a los municipios que posterguen la incineración de basuras.

2.000 HECTAREAS

De todos los incendios originados en el Levante español, el de Andilla ha sido el que más superficie ha destruido, de la que el 30 por cento era arbolado y el 70 por ciento monte bajo.

El fuego, cuyas causas todavía se desconocen, obligó a la evacuación de más de 350 personas, habitantes de Sacañet y de la pedanía de Canales, de Más de los Pérez y Bejis, así como un campamento en Artaj en el que se encontraban unos 250 niños.

Para su extinción, colaboraron efectivos del Icona y de las comunidades de Valencia y Aragón, así como de la Guardia Civil, Policía Autonómica, bomberos y Cruz Roja. En total, participaron 4 helicópteros, 4 vionetas y un hidroavión.

Respecto al incendio localizado en la Venta de L'Home, en la localidad de Buñol (Valencia), y que ha afectado unas 1.000 hectáreas, de las que 150 eran de arbolado y el resto matorral y monte bajo, pudo ser controlado ayer al mediodía, gracias a las condiciones meteorológicas.

Con motivo de ese siniestro, fue necesario desalojar a unas 1.500 personas, entre las que figuraba una colonia de niños que fueron trasladados a una residencia de Buñol, y cortar la carretera Nacioal III desde las 15.30 horas hasta las 20.30, hora en la que fue abierta nuevamente.

Por su parte, Renfe también cortó la línea que une Valencia con Madrid y dispuso autobuses para suplir las necesidades del servicio. Desde esta mañana, la línea funciona con total normalidad, según las citadas fuentes.

Por otra parte, el resto de los incendios localizados en las provincias levantinas fueron de dimensiones más reducidas. Unas 140 hectáreas ardieron en los municipios de Benissa y LLibert (Alicante)por causas todavía desconocidas, y aunque el incendio se puede dar por extinguido, todavía permanece un retén de vigilancia.

Igualmente, resultó controlado el incendio de Benimeli, que comenzó ayer, sobre las 22.30 horas, de forma intencionada, y quemó unas ocho hectáreas. En Rafol de la Almunia, también ardieron unas dos hectáreas de matorral.