Según informó hoy la Federación en un comunicado, "ante la falta de soluciones concretas del Gobierno a los problemas que afectan a los profesionales del taxi y sus familias", se decide apoyar la huelga.

Los taxistas aprovecharán la huelga del 20-J contra la reforma del desempleo para enunciar ante el Gobierno la falta de un gasóleo profesional para el sector, la jubilación anticipada a los 60 años y la mejora de las prestaciones sociales para los autónomos.