El vicepresidente primero del Senado, Alfredo Prada, informó en rueda de prensa que estos criterios apuntan a que los servicios mínimos para los funcionarios de la Cámara rondarán el 28%, con el objetivo de que el pleno se pueda desarrollar con normalidad, aunque será en una reunión con el comité de empresa el próximo martes cuando queden definitivamente ijados.

Estos servicios mínimos se establecerán sobre los funcionarios de la Cámara, en departamentos como taquígrafos, ujieres, servicios sanitarios, portería y servicios informáticos.

El pleno de la próxima semana en el Senado comenzará el martes, día 18, por la tarde y continuará durante el miércoles y jueves, 19 y 20, en sesiones de mañana y tarde ambos días.

Este "denso" calendario tiene como objetivo terminar con toda la actividad legislativa pendiente antes de que acabe el periodo de esiones -el 30 de junio-, y sólo quedará por celebrar un pleno monográfico sobre la Ley de Partidos el día 25.

Concretamente, el día 20 se debatirán y votarán los proyectos de ley de Internet -que contará con la presencia de la ministra Anna Birulés-, la reforma para que los inmigrantes iberoamericanos puedan ingresar en el Ejército y otras reformas de la Ley de Enjuiciamiento Criminal y del Estatuto de los trabajadores.

Prada aseguró que durante la reunión de la Junta ningún portavoz de los grups mostró su disconformidad con este calendario ni con el hecho de que se celebre la sesión plenaria del día 20.

Sin embargo, el Bloque Nacionalista Galego e Izquierda Unida denunciaron, mediante un comunicado conjunto, "la actitud de absoluto boicot a la huelga general por parte del PP, que ha decidido llevar a cabo una contra-huelga a la japonesa para ese día en el Senado".

Según los senadores de ambas formaciones, "el PP ha decidido alargar absurdamente el pleno", con un "talante autoritario y e rabia contenida en la Junta de Portavoces" de hoy y ante "la actitud pasiva y complaciente del PSOE".