Ampliación

PSOE. Zapatero asume “errores de gestión y comunicación imputables sólo a nosotros” que han contribuido a la derrota electoral

- Reconoce que el PSOE está “herido” y reclama un debate interno “robusto”

- Valora el fin de ETA como “el hecho de mayor alcance histórico” de los últimos años

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció este sábado ante el Comité Federal “errores de gestión y de comunicación imputables sólo a nosotros” que han contribuido a la derrota electoral del pasado domingo, junto al desgaste por la crisis económica.

Ante el máximo órgano de dirección del PSOE entre congresos, Zapatero rindió cuentas del resultado electoral, que debe ser asumido colectivamente, “yo el primero”, y como después hizo también el candidato, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que él mismo dio la palabra “para que sienta el calor de todos”.

Sus primeras palabras fueron para destacar que han sido las primeras elecciones democráticas “sin la amenaza del terrorismo”, y pese a que la resolución de la crisis económica puede parecer “más apremiante” para los ciudadanos, algo que comprende, ese final de ETA es “el hecho de mayor alcance histórico de los últimos años”.

“Sin duda lo es, porque otros hechos pasarán, y éste quedará como patrimonio de todos los demócratas”, dijo Zapatero, que agradeció a Rubalcaba su contribución a ese final de ETA y haber decidido “dejarlo deliberadamente al margen” de la campaña electoral, precisamente para que no hubiera duda de que todos los demócratas pueden sentirlo como mérito propio.

Después de una campaña en la que el PSOE ha evitado “sacar pecho con fines espurios”, los socialistas pueden ahora expresar su satisfacción y orgullo por haber sido útiles a los ciudadanos y con el país ejerciendo un papel “relevante” en el final del terrorismo de ETA.

Pasó a continuación a analizar las circunstancias “extraordinariamente difíciles” y “tan poco propicias” en las que se desarrolló la campaña electoral, por las que agradeció al candidato “el esfuerzo realizado, el empeño puesto, la energía desplegada”, y arrancó así un aplauso para Rubalcaba por parte de la dirección del PSOE a modo de agradecimiento por el esfuerzo.

Zapatero agradeció también el trabajo del Comité Electoral personificado en Elena Valenciano, y el respaldo de siete millones de ciudadanos, y señaló el programa electoral como base de ese compromiso con los ciudadanos y, por tanto, guía de partida de la labor de oposición.

LA CRISIS ECONÓMICA

La crisis económica ha sido la causa “principal” de la derrota, pero eso no quiere decir, apuntó, “que no hayamos cometido errores de gestión y de comunicación imputables sólo a nosotros”, que no detalló pese a considerar esa reflexión muestra suficiente de la capacidad de autocrítica del PSOE.

Está siendo “la peor” crisis conocida por las generaciones vivas, aseguró, por la cual es lógico que los ciudadanos pidan responsabilidades a los gobernantes, sobre todo cuando en mayo de 2010 percibieron como “ejecutor” de los ajustes a quienes antes se habían esforzado por ensanchar derechos y libertades.

Zapatero esbozó una consecución cronológica de la evolución de la crisis y de la consecuente gestión del Gobierno, centrada en garantizar la solvencia y autonomía financiera de España, y que obligaron a medidas “inevitables” que afectaron a la renta disponible de muchos ciudadanos pese a los esfuerzos por preservar la equidad y reforzar los pilares del estado del bienestar.

“Seguramente no acertamos a explicarlo en un discurso global y coherente”, reconoció el presidente, guiado no tanto por necesidad de autojustificación, aseguró, sino por la convicción que aún mantiene de que “no había alternativa” posible para evitar “graves consecuencias” para la economía española a corto y a medio plazo.

Sobre el esfuerzo desplegado para mantener esos pilares del estado del bienestar, dijo Zapatero, en los electores ha primado “el reproche” por las consecuencias de la crisis y el ánimo comprensible de intentar “cambiar la realidad por la vía de cambiar el gobierno”.

“Debemos respetarlo”, dijo a los suyos, pero preservando los valores y principios del proyecto socialista, porque el PSOE sigue siendo capaz de movilizar a la mayoría progresista cuando se percibe como alternativa de gobierno, y el objetivo prioritario es volver a serlo “pronto”.

“Salimos heridos de esta derrota”, reconoció, pero hay que recordar que la historia del PSOE está hecha “de victorias y de derrotas”, y se construye “congreso tras congreso”, y ahora hay que propiciar un debate interno “robusto” y una “libre elección democrática” de una nueva dirección para recuperar esa capacidad de alternativa.

El PSOE está ya “en tiempo de congreso, de los militantes, de abrir la nueva etapa”, concluyó Zapatero, que agradeció el apoyo del partido “en tiempos tan complicados” y reiteró el afecto a los dirigentes, a los militantes, y a los electores que pese a todo han confiado en los socialistas.

(SERVIMEDIA)
26 Nov 2011
CLC/MML/pai