Según informó este viernes la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, los miembros del grupo, asentados en Castellón, adquirían el estupefaciente a un individuo de nacionalidad albanesa afincado en Barcelona y posteriormente lo distribuían en cantidades importantes a otros clientes habituales con quienes se reunían en localidades próximas a Castellón de la Plana.

En la operación se han registrado dos domicilios en Burriana y Onda (Castellón), donde se han intervenido 35 kilos de sustancia de corte, 158.600 euros, una prensa, seis vehículos y documentación falsa que algunos de los integrantes utilizaban ya que eran buscados para su detención e ingreso en prisión.

En febrero de este año los agentes detectaron la presencia de un clan asentado en Castellón que distribuía heroína en grandes cantidades desplazándose a diferentes localidades con grandes medidas de seguridad.

Los investigadores averiguaron que los integrantes del grupo habían concertado una cita con dos personas que iban a desplazarse desde Murcia hasta Castellón, por lo que establecieron un dispositivo de vigilancia que les condujo hasta la localidad alicantina de Elda.

VIVIENDA DE SEGURIDAD

Así, los agentes interceptaron el vehículo conducido por los compradores del estupefaciente que fueron arrestados al detectar dos kilos de heroína ocultos en un doble fondo del maletero en el que viajaban.

Posteriormente, una vez que la investigación se centró en las personas que suministraban la droga al clan, averiguaron que se trataba de un individuo albanés asentado en Barcelona.

Un nuevo dispositivo policial permitió interceptar al proveedor de la heroína, que viajaba con 14 kilos de heroína escondidos en un hueco realizado bajo los asientos delanteros, a su llegada a la localidad de Burriana, donde la organización contaba con una vivienda de seguridad.

A continuación, los investigadores registraron el inmueble donde fueron detenidos dos de los integrantes del grupo familiar investigado y se incautaron de siete kilos de heroína en un doble techo del cuarto de baño y 35 kilos de sustancia de corte escondidos en un armario y una prensa.

Además, se registró un chalé en Onda donde otras siete personas vinculadas al clan resultaron detenidas y se intervinieron 158.000 euros en efectivo, numerosos teléfonos móviles, ordenadores portátiles, munición del calibre 9 milímetros y tres vehículos.

Un día después se detuvo a otro integrante de la banda en Castellón.