Durante una entrevista con Cristina López Schlichting que esta noche emite 13 Televisión a partir de las 22 horas, Aznar se refiere a los rumores que colocan a su mujer como la primera edil de la capital. “No sé si será o no. Yo no lo sé. Pero reúne muchas condiciones. Tiene voluntad, inteligencia, tesón y resistencia”.

Aznar habla por primera vez tras el triunfo del PP en las elecciones generales del 20 de noviembre, en las que Mariano Rajoy obtuvo un triunfo con mayoría absoluta de 186 escaños. Esa noche, Aznar acudió a la sede nacional del partido para compartir la alegría con sus compañeros, a pesar de que no había vuelto en una noche electoral desde la derrota de 2004.

Denuncia que tras perder aquellos comicios, “intentaron eliminar mi figura política y tuve que defenderme”. Ahora, "se ha cerrado un proceso lógico desde mi salida del Gobierno y mi renuncia a presentarme como candidato a las elecciones de 2004”. Por eso, explica que la noche del 20-N acudió a la sede nacional de la calle Génova "porque quería felicitar" a Rajoy y aclara que no piensa "volver por la planta séptima de la calle Génova”, como había ocurrido en los siete años anteriores.

En clave económica, Rajoy advierte de que “España no tiene buena imagen en el exterior” y, por eso, “va a costar salir años de esta” crisis. Para ello, reclama "volver a la disciplina económica y la estabilidad presupuestaria”.

Junto al sistema de pensiones, Aznar entiende que “con cinco millones de parados hace falta una reforma laboral" porque "hemos roto nuestros deberes como miembros del Club del euro y no cumplimos con la flexibilidad”.

Aznar no da importancia a las posibles movilizaciones sociales contra los ajustes que emprenda el PP y aduce que “la mayor pérdida de derechos es no tener trabajo".

Finalmente, asegura que la llegada de Amaiur al Congreso de los Diputados es "muy preocupante" para España por "el riesgo de que algunos planteen el derecho de secesión en poco tiempo”.

En su opinión, “los terroristas que han amenazado a España durante tanto tiempo han cambiado de estrategia, pero no de objetivos: quebrar las instituciones, eliminar nuestra democracia y quebrar a España”.