Dos de cada tres analfabetos en el mundo son mujeres

- Según Entreculturas

MADRID
SERVIMEDIA

Alrededor de 759 millones de adultos en todo el mundo no saben leer ni escribir, y de ellos, dos tercios son mujeres.

Así lo denunció este martes Entreculturas en su informe “Las Niñas a Clase: una cuestión de justicia”, donde reivindica la igualdad de acceso y trato para las niñas en el sistema educativo.

Según este trabajo, el 53% de los 67 millones de menores sin escolarizar en todo el mundo son niñas, lo que representa 35 millones de jóvenes que tendrán más probabilidad de morir durante el embarazo o el parto, sufrir violencia y contraer enfermedades de transmisión sexual como el VIH.

La responsable de Estudios e Incidencia de Entreculturas, Valeria Méndez de Vigo, señaló que las mujeres que han terminado la primaria en África “son más respetadas, más participativas y aportan el doble de ingresos a sus familias que las que no lo son”.

Un total de 69 países no han alcanzado “la equidad de género en educación”, subrayó Méndez de Vigo, y agregó que “ningún estado de África envía a más del 50% de sus niñas y jóvenes a clase”.

Con todo, el mayor problema es de abandono temprano, pues si una familia tiene que elegir por cuestiones económicas siempre enviará a clase al varón, subrayó Méndez de Vigo.

Así, en muchos países el porcentaje de niños y niñas en los primeros cursos es prácticamente del 50% en cada caso, pero este índice cae hasta 10 puntos al terminar primaria y empeora aún más en secundaria.

Más INVERSIÓN

Según Méndez de Vigo, la inversión en ayuda oficial al desarrollo del primer mundo "ronda los 5.000 millones de dólares al año, cuando para garantizar el derecho a una educación básica universal se necesitarían cerca de 16.000”.

Es cierto que ello supone más que triplicar la ayuda oficial, prosiguió, aunque 16.000 millones de dólares equivalen al gasto militar de seis días”, destacó la responsable.

También pidió a todos los estados destinar el 6% de su PIB a educación, e instó al gobierno español a aumentar el porcentaje de ayuda dedicado específicamente a este terreno, ya que “el objetivo mínimo debería ser el 8%, y en la actualidad España no llega ni al 4%”, afirmó.

Como medidas concretas, Méndez de Vigo propuso eliminar las tasas directas de matrícula y otros gastos asociados a la educación como transporte, uniformes, material escolar; otorgar becas y subsidios directos a las niñas; trabajar con las familias, y fomentar la contratación de maestras.

Además abogó por mejorar la formación de los docentes en equidad de género y garantizar “espacios seguros para las niñas en la escuela.

Estas medidas se pusieron en marcha hace seis años en la región andina de Quispicanchi (en Perú), con la colaboración de Fe y Alegría y del Instituto Peruano de Educación en Derechos Humanos y la Paz (Ipedehp).

Según Rosa María Mugica (del Ipedehp), las niñas entonces no querían hablar, y aunque empezaban la escuela en la misma proporción que los chicos, solo el 39% acababa sexto curso, cuando ahora se ha llegado a un 100%.

La líder campesina Rosa Quispe destacó las mejoras que esta intervención ha supuesto en su vida y en la de toda su comunidad, donde ahora los padres “dan más cariño a sus hijos” y la violencia de género ha disminuido.

(SERVIMEDIA)
15 Nov 2011
AGQ/jrv