Según informó este viernes la constructora a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los ingresos bajaron un 16,3%, hasta los 3.033,1 millones de euros.

Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) se incrementó un 34,7%, hasta los 427,4 millones.

El presidente de Sacyr, Manuel Manrique, indicó en un encuentro con analistas que los resultados muestran que la empresa se mantiene “estable” a pesar del difícil contexto económico nacional e internacional, con una “mejora en sus márgenes”.

Manrique aprovechó, además, para recordar que el Grupo ha cumplido 25 años y aseguró que es un honor para él ser el quinto presidente de Sacyr.

Por ramas de actividad, los ingresos en construcción bajaron un 9,8%, hasta los 1.945 millones. Cabe destacar que en el negocio nacional el descenso es del 18,1% (1.049 millones de euros).

En el caso de los servicios, las ventas se situaron en los 721 millones, un 5,6% menos, y en patrimonio el descenso fue del 1,3%, hasta los 185 millones.

Mientras, en concesiones los ingresos se dispararon un 133,7%, hasta los 108 millones. Respecto a la rama inmobiliaria, se redujeron un 77,5%, hasta los 130 millones.

Por otra parte, la cartera de obra del Grupo alcanzó los 50.653 millones de euros, de los que el 62% corresponde a mercados internacionales. “Esto nos da una razonable estabilidad en la actividad futura del Grupo”, aseguró el director financiero de Sacyr, Fernando Lacadena, en la presentación de resultados.

Respecto a la deuda financiera neta, a cierre del tercer trimestre, ésta se situó en los 11.391 millones de euros, de los que 4.936 corresponden al préstamo para adquirir el 20,01% de Repsol, y que el Grupo está en proceso de refinanciación.