Así se desprende de un informe sobre el mercado de trabajo con datos de 2020 elaborado por el Ministerio de Trabajo y Economía Social y consultado por Servimedia.

Las únicas regiones que registraron un saldo positivo de contratos que han requerido movilidad geográfica, es decir, hubo más firmas que requirieron entrar a la región que salir, fueron Comunidad de Madrid, con 151.367 contratos; seguida de Región de Murcia (29.604); Navarra (24.730); Cataluña (8.391), y País Vasco (1.552).

Si se compara con 2019, en ese año fueron siete las comunidades receptoras y repitieron las cinco ya citadas más Aragón e Islas Baleares.

El saldo, aun siendo positivo, bajó en Cataluña (-84,9%), País Vasco (-76,9%) y Comunidad de Madrid (-37,7%). En cambio, se incrementó en Murcia (+57,2%) y Navarra (+25,5%) pese a ser año de pandemia.

El año pasado hubo solo dos comunidades autónomas que cambiaron de signo en su saldo y pasaron a ser emisoras de contratos: Aragón e Islas Baleares.

Entre el resto de comunidades emisoras, todas moderaron el saldo negativo reduciéndolo. Destaca Andalucía, que tradicionalmente es la que se anota el saldo negativo más elevado y en 2020 fue la que experimentó la mayor reducción del mismo, al igual que en Castilla-La Mancha, que suele ser la segunda con peor resultado y el año pasado fue superada por Extremadura y Canarias.

En total, en 2020 se firmaron 1.572.955 contratos que requirieron el desplazamiento geográfico de trabajadores entre comunidades autónomas por motivos laborales, lo que representa un 28,68% menos que en 2019. No obstante, la tasa de movilidad se incrementó ligeramente hasta el 9,88%, frente al 9,81% de 2019.

“Las medidas adoptadas para contener la pandemia, a partir de la declaración del estado de alarma a mediados de marzo, repercutieron en un descenso brusco de la contratación hasta niveles similares a los años centrales de las crisis de 2008 y 2012. No obstante, a diferencia de entonces en 2020 las tasas de movilidad no se han reducido”, explica Trabajo en el informe.

En cuanto a los flujos entre comunidades autónomas, destacan los intercambios entre Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid por ser los más voluminosos. Se registraron unas salidas de la primera hacia la segunda de 103.033 contratos, y 63.066 en sentido contrario.

Por su parte, de Cataluña pasaron a la Comunidad de Madrid 31.207 contratos, y de Madrid a Cataluña se dirigieron 26.104.