Según los datos publicados este viernes por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), el acumulado del año registra todavía una subida del 8,8%, hasta las 647.955 unidades.

Comparado con los nueve primeros meses de 2019, ya que el año pasado estuvo afectado por la paralización de la actividad por la pandemia, las ventas acumuladas de turismos y todoterrenos caen un 33%.

Anfac atribuye la caída, además de a la ausencia de semiconductores, a la crisis provocada por la pandemia y a la incertidumbre de los consumidores ante cómo va a evolucionar la crisis económica. Además, no espera que la escasez de chips tenga una solución a corto plazo ni que el mercado recupere impulso en el último trimestre.

Pese a todo el canal de alquiladores consigue aumentar sus ventas un 39,6%, hasta las 5.373 unidades. El más penalizado sigue siendo el canal de particulares, que entrega solo 28.593 y experimenta una caída del 21,8%, mientras el canal de empresas cae un 15,3%, con 25.675 unidades.

En cuanto a los vehículos comerciales ligeros, en septiembre se matricularon 9.930 unidades, lo que supone un 30% menos que en 2020.

En el acumulado del año, las ventas de vehículos comerciales ligeros alcanzan las 120.053 unidades, aumentando un 9,9% respecto a 2020.

Por otro lado, las matriculaciones de vehículos industriales, autobuses, autocares y microbuses caen un 12,5% respecto a septiembre del año pasado, con 1.068 unidades.

En el acumulado del año, las ventas en este segmento crecen un 17,5% respecto de 2020, hasta las 14.236 unidades, pero con una caída del 20,3% si se compara con el mismo periodo de 2019.