Lo dijo en una entrevista en TVE recogida por Servimedia en la que comentó no tener “más que satisfacción y buen trabajo” con los nuevos ministros y ministras que nombró el presidente del Gobierno en la remodelación de julio y volvió a recordar que, aunque no afectó a ninguno de los designados por Unidas Podemos, este espacio ya había “mudado con la salida de Pablo Iglesias”, quien dejó el Ejecutivo para presentarse a las elecciones madrileñas de mayo.

Ahora, justificó Díaz cuando se le preguntó por posibles novedades en lo que queda de año, “este trimestre es muy importante para nuestro país”, pues ha de acometer “47 grandes reformas estructurales” y, una vez superada la fase aguda del coronavirus, “la parte más difícil técnicamente es la transición hacia la salida de la crisis”. En Unidas Podemos, sentenció la vicepresidenta cuando se le insistió si eso significaba que no habría cambios de ministros, “tenemos los esfuerzos volcados hacia la gestión de esta transición”.

Antes, la vicepresidenta ya había constatado que a ella no le “gustan ni los tuits ni el ruido”, y resaltó cómo ayer que expuso internamente a Sánchez la posición discrepante de Unidas Podemos respecto a la ampliación de El Prat. “Lo hemos hecho con silencio y nadie se ha enterado”, apostilló.

Enjuició que “la ciudadanía tiene derecho a conocer los puntos de encuentro y de distancia que hay en los gobiernos”, de coalición o no, pero que “las cosas han de hacerse de manera tranquila” porque “los ciudadanos no se merecen un ruido añadido” y “las diferencias se pueden pactar” entre el PSOE y Unidas Podemos. “El Gobierno trabaja más unido de lo que parece”, sentenció, declarándose “orgullosa” de pertenecer a él.