En una entrevista en RNE recogida por Servimedia, Rodríguez afirmó que para abaratar el coste se trabaja en un “plan muy extenso respecto a la transformación energética” que va más allá de las medidas a corto plazo que también se han puesto en marcha, como la rebaja del IVA o la eliminación del impuesto a la generación.

“Vamos a incidir en la factura que pagamos”, dijo Rodríguez, porque se habla “mucho del precio del kilovatio por hora” pero el Ejecutivo se fija en que los recibos que pagan los ciudadanos consigan “amortiguar el golpe” del precio de la electricidad.

“Estamos trabajando en estos mismos días”, recordó la portavoz, en un “plan de choque” con el que “nos comprometemos” a que “estas medidas que terminarán de ver su fruto el último trimestre” sirvan para que el recibo de los hogares sea “similar” al que se abonaba en 2018.

“Inminente”, sostuvo la portavoz que será la aprobación del plan de choque, pero no concretó la fecha. También remarcó que “fundamentalmente” afectará a la vía tributaria pero también abordará otros aspectos porque “se va a incidir en la factura que pagamos en los hogares”.

“Hablamos mucho del precio del kilovatio/hora”, que es el “mercado mayorista”, pero “independientemente” de ese precio, el Gobierno trabaja para que “el recibido consiga amortiguar este golpe”, defendió.
Finalmente, la portavoz despejó un horizonte de elecciones defendiendo que el Ejecutivo es “plenamente consciente de los intereses de la ciudadanía y no ésta pensando en las próximas elecciones”.