Lo hizo en un momento en que la evolución de la pandemia se ha traducido en un aumento de los contagios en las mujeres embarazadas, con el consiguiente incremento de las hospitalizaciones, ingresos en UCI y fallecimientos.

Al mismo tiempo, se ha observado que el riesgo de complicaciones afecta no sólo al tercer trimestre del embarazo, sino también a las fases finales del segundo trimestre.

Ante esta situación, Sanidad decidió recomendar la vacunación de las mujeres embarazadas, ya que la vacuna “evita complicaciones” durante el periodo de gestación, especialmente si existen factores de riesgo, como obesidad, una edad superior a 35 años, hipertensión arterial, diabetes o preemclampsia.

También determinó que “no existe contraindicación” para la vacunación en ningún trimestre del embarazo, por lo que urgió a facilitar que las mujeres embarazadas lleguen completamente vacunadas al periodo de máximo riesgo de complicaciones en caso de infección por coronavirus: finales del segundo trimestre y tercer trimestre.

A su vez, consideró fundamental que se priorice la vacunación de las mujeres embarazadas por su mayor riesgo frente a la Covid-19 fomentando estrategias de captación específicas para este sector de la población.

Señaló que las vacunas elegidas para la vacunación de las gestantes han de ser de ARNm, con independencia de su edad, al tiempo que indicó la importancia de que las personas de su entorno estén correctamente vacunadas y refuercen las medidas de prevención.

Por último, sugirió a las mujeres que estén planificando quedarse embarazadas que completen su vacunación antes y que consulten con su médico el mejor momento para vacunarse.