La entidad provisionó 55,8, cuantía que arroja una caída del 50,9% interanual frente a los 113,5 millones del primer semestre del 2020, según informó este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La mejora de la cuenta se apoya en la marcha del negocio ya que subió un 2,8% los recursos de clientes en balance, hasta los 67.248 millones; aunque el saldo crediticio aún cayó un 0,1% y se situó en 31.571 millones.
La expansión en recursos de clientes se apoyó especialmente en un aumento del 8,8% interanual en los activos gestionados y seguros, o con avances del 63,2% en la nueva producción de primas de seguros de vida riesgo, de vida y no vida. La rúbrica de recursos de clientes bajo gestión y seguros supone ya el 47,3% de la totalidad de los recursos de clientes del banco.
En crédito, reportó un crecimiento del 5% en el semestre en la financiación con empresas y del 4,07% interanual. Por otro lado indicó que los clientes digitales crecen un 7,7% frente a junio del pasado y ya superan los 865.000.
A pesar de la evolución del negocio, el margen de intereses decreció un 8,2% en comparativa interanual condicionado por el impacto de los tipos de interés negativo en el rendimiento de la cartera de crédito.
Una evolución que llevó a los ingresos recurrentes, que integran margen de intereses y comisiones, a caer un 0,2% y situarse en 449 millones, pese a que la contribución de las comisiones se incrementó un 20,9% en el semestre.
En la parte baja de la cuenta, los gastos totales aumentaron también un 4,4% interanual y espera que en "los próximos meses" se visibilice el ahorro de costes asociado a las 750 salidas de personal previstas en su Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
En cuanto a la calidad y fortaleza del balance, Ibercaja cerró junio con un ratio de capital CET1 ‘fully loaded’ o de máxima exigencia del 12,7%, y su morosidad bajó en 37 puntos básicos, hasta quedar en el 2,8%, con un ratio de cobertura de los activos problemáticos del 64,2%.