Según el SUP, “errores” de este tipo “se pueden pagar con muertes”, por lo que este sindicato policial pidió al Gobierno que no entre en la negociación que piden los mediadores internacionales.

A través de un comunicado, este sindicato señaló que el pronunciamiento de la conferencia de la capital donostiarra “es despreciable”. A juicio de estos policías, “decir a ETA que debe disolverse y que después debe ser reconocida por los gobiernos de España y Francia para hablar de las consecuencias de su disolución es decir que los terroristas han hecho bien en mantener el terror porque al final obtendrán un rédito por tantos crímenes cometidos”.

Por este motivo, el SUP estimo que “el responsable político de España que acepte esa condición, se convierte desde nuestro punto de vista en un traidor a España, a los españoles y a las víctimas y sus familias”.