Junqueras participó en una jornada sobre ‘Solidaridad y autodeterminación’ organizada por el BNG, en la que quiso lanzar un mensaje “de optimismo” ante unas circunstancias “difíciles” y retos que “no son fáciles de superar”.

“Incluso la cárcel forma parte del camino a la libertad”, dijo, “a la libertad colectiva de nuestros pueblos”, que se recorre defendiendo el “principio democrático” de que, cuando un pueblo se expresa “reiteradamente, de forma clara, cívica y pacífica” en un determinado sentido, es “obligación de las instituciones hacer posible que esa voluntad se concrete”.

En ese sentido, aseguró que en ERC están “convencidos de que la república catalana no solo es posible sino que es inevitable”, y de que para hacerla realidad es necesario “que seamos muchos más, y que seamos mucho más fuertes”.

Por ello, emplazó, “debemos dirigirnos a sectores cada vez más amplios de la sociedad”, como debe hacer “cualquier demócrata de cualquier lugar del mundo”.

Junqueras señaló en ese punto una “enseñanza” de la comunidad internacional, y es que esa comunidad “se acerca a nosotros, se interesa por nuestra situación” y esperanzas en dos sentidos: “el anti represivo” y “la defensa de la negociación”. “Lo que siempre nos piden”, dijo, es que “seamos paladines de negociación, que no nos levantemos nunca de las mesas de negociación”.

“No hay camino mas rápido y más efectivo” hacia esa república catalana que el reconocimiento internacional, dijo, y no hay otro camino para ese reconocimiento que “intentar aprovechar y cumplir estos buenos consejos” de la comunidad internacional.