Así lo expresó el director general de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), José López-Tafall, en la presentación del informe anual sobre el sector que tuvo lugar este martes.

Según los datos ofrecidos por Anfac, la inversión del sector en I+D+I ha caído un 30% respecto a 2019, pero se sitúa en 2.000 millones de euros, “la media de inversión de los últimos 5 años”, indicó el director general de la asociación.

Además, en la presentación se destacó la aportación del sector a la balanza comercial española gracias a la actividad exportadora (17.000 millones) y su contribución al empleo (9% del total) y al PIB nacional (11%). La recaudación fiscal de la automoción acumuló 25.645 millones de euros, lo que supone un retroceso del 16,8% en comparación con 2019, por la pandemia, según Anfac.

López-Tafall insistió en el firme compromiso de la patronal automovilística con los objetivos de descarbonización, con la entrada de tres millones de turismos eléctricos y la reducción de al menos un 33% en las emisiones de CO2, objetivos a conciliar con el mantenimiento de la producción y el empleo, “que es irrenunciable”, alcanzando una media de 1,3 millones de vehículos matriculados en el periodo 2020-2030.

Asimismo, resaltó las áreas en las que hay que trabajar para impulsar la transición energética, señalando como principales el desarrollo de la infraestructura de recarga eléctrica, la promoción de la renovación del parque automovilístico, planes de incentivos y beneficios fiscales para el vehículo electrificado y una nueva fiscalidad con “enfoque medioambiental e incentivadora de la retirada de vehículos antiguos”.

Los vehículos eléctricos no siguieron la tendencia de caída generalizada del sector y representaron en 2020 un 4,2% de la cuota de mercado, mientras que en lo que llevamos de año registran un 6,6%.

El director general de Anfac reconoció que le gustaría como sector "que la electrificación sea aún más rápida”. Por ello, propuso “acelerar más la creación de puntos de infraestructura de recarga públicos” –se implantaron 938 en España en 2020-, puesto que considera que “la reducción de emisiones solo será posible” si esos puntos aumentan.

Acerca de la configuración del parque de automóviles a medio plazo, López-Tafall manifestó que espera una reducción neta de cinco millones de vehículos para el año 2030, pues se estima que, para ese año hayan salido 19 millones de los vehículos actuales y hayan entrado 14 millones de coches nuevos. El parque será, según sus palabras, “más pequeño, nuevo y seguro”.

El director general de Anfac insistió en la importancia de hacer un buen aprovechamiento de los fondos europeos, por lo que espera que los proyectos para la recuperación o Pertes permitan “ganar competitividad” al sector y que se impulse la “colaboración público-privada para garantizar una industria competitiva y tractora para la economía”.

Preguntado por el establecimiento de zonas de bajas emisiones en las ciudades de más de 50.000 habitantes, López-Tafall afirmó que es “una buena herramienta” para “ordenar el tráfico en las ciudades y resolver los problemas de calidad del aire” y, por otro lado, “para impulsar la renovación del parque de vehículos”.