En él lamentan el proceso de “deterioro” que, a su entender, sufre la Atención Primaria de Salud (APS) desde la crisis de 2008, “agravado” por la pandemia y defienden que un servicio “bien dotado, organizado y motivado hubiera sido necesario para un buen control de la misma, y los problemas del modelo tras 40 años de su puesta en marcha”.
Por ello ven “necesario y urgente” incrementar los recursos y acabar con las “limitaciones e inequidades de acceso”, la medicalización, la masificación y las malas condiciones laborales del personal.
Así, entre sus medidas, reiteran la importancia de incrementar el presupuesto sanitario para alcanzar el 25% del presupuesto sanitario público, recuperar las plazas amortizadas desde la crisis del 2008 e incrementar las plantillas para que se ajusten a las demandas de salud de la población, con un “compromiso”, además, de cubrir todas las bajas por jubilación que se van a producir en los próximos años.
Junto a ello, reclaman que se refuercen los equipos incorporando nuevas categorías profesionales a los centros de salud para satisfacer una buena parte de la demanda asistencial que, a su juicio, “recae irracionalmente sobre las consultas médicas”.

OTRAS MEDIDAS

Orientar la actividad de la Atención Primaria a la promoción, prevención, rehabilitación, a actividades comunitarias dirigidas a actuar sobre los “determinantes de la salud generadores de inequidades”, acabar con la “precariedad y la inestabilidad” del personal y poner en marcha sistemas de participación social en Atención Primaria son otros de los puntos “clave”, según los firmantes, para “recuperar” una Atención Primaria “reforzada, motivada y con los medios suficientes” para poder resolver “más del 80% de los problemas de salud de la población y hacer frente a nuevos eventos pandémicos”.

“Exigimos un esfuerzo presupuestario del Gobierno de la nación y de las comunidades autónomas para responder a los retos que tiene planteado este primer escalón asistencial que es clave para resolver los problemas de salud”, señalan las organizaciones, para quienes, con estas medidas, “se trata de convertir los aplausos y las promesas en hechos concretos”.